Confinadas

En estos días en los que nos encontramos confinadas nos estamos acompañando, con escucha, palabras, reflexiones, imágenes, música, lecturas, audios….todo a través de las pantallas, toda nuestra relación fuera del hogar es a través de lo virtual.

En ReCreándome algunas hemos compartido nuestros sentires bien a modo de imagen, palabras o incluso silencios….

«...pero en todo movimiento global hay favorecidos….

Y mientras una parte de la humanidad se revuelca en su propio dolor, repartiendo autocompasión a golpe de gigas, mientras tratamos de pagar con aplausos aquello que no defendimos en las calles ni en las urnas, miles de millones de seres vivos en absoluto silencio tratan de comprender lo que pasa…dónde estamos….vuelven a lo que un día fue su casa… la de sus ancestros…miles de generaciones perdieron su espacio,

y ahora ellas vuelven….sin querer ser vistas, que nadie se percate porque allá va la plaga a matarrlo todo…

…dichosos los ojos y oídos que son testigos, que dejan que pase, que no estorban…

…aunque los maderos estén estos días a pleno rendimiento para satisfacer a esta humanidad en su mayoría, ciega y sorda que acaba de descubrir que siempre llevó guantes y mascarilla…»

 

   «Hacía tiempo que resonaba la palabra crisis, unida al clima, a la economía, a los valores humanos. La climática nos mostraba sus efectos año tras año, pero lejos de este lugar dónde vivimos, si acaso, la falta de lluvia nos avisaba, sin brusquedad, de la situación, pero,  acostumbrados como estamos y dado que, nuestro monocultivo económico es el turismo, no parecía inquietarnos. Mientras,  en otros lugares del planeta,  efectos devastadores como inundaciones o sequías estaban  obligando a migrar  hacia lugares donde las personas son tratadas de la forma más deleznable.

El mismo trato reciben quienes huyen de guerras  o pobreza producida por un sistema económico biocida, basado en la desigualdad y  el extractivismo sobre territorios y cuerpos. Nosotras, en cambio, habitantes de estas islas, habíamos sufrido la crisis económica de 2008, y como consecuencia una pérdida importantísima de bienestar, con peores servicios públicos y peor acceso a bienes de primera necesidad. Habíamos aceptado todo esto como una situación inevitable.

Esperábamos la llegada de mejores tiempos cuando escuchamos que un virus mortal  afectaba a una población de China. De nuevo, afectaba a personas desconocidas y quisimos seguir con nuestra vida, hasta que, sorpresivamente, nuestro gobierno declara el estado de alarma y acabamos confinados, llenos de confusión e incertidumbre, y con mucho tiempo para pensar en qué y porqué ocurre esto.  Un sentimiento de vulnerabilidad y fragilidad se apodera de nuestra vida, descubriendo que el sistema económico, político y social que hemos aceptado, no nos protege debidamente, no ya a quienes vienen de lejos, sino a nosotras mismas.

    Nos asomamos, ansiosas, a internet, buscando respuestas, después de esta brutal sacudida. Encontrando, por un lado, más confusión y abundantes alertas sobre un futuro desalentador, y por otro, esperanza y oportunidad. Esta última requiere  compromiso, tenacidad y mucho esfuerzo de cada una de nosotras. Hay información y experiencias de las que partir, y solo será posible si hay unión, comunidad y cooperación como especie. Después del confinamiento es de primera necesidad, ocupar las calles.  Tenemos que repensarnos juntas.»     

 

«Esto no se ha terminado aún, queda mucho para que acabe, a no ser que se cree una vacuna estaremos en peligro de contagio y muerte.

Como lo llevo? ni sé, voy encima de la montaña rusa de emociones.

Ni pensar quiero ya sobre esto, no puedo quejarme, se que hay gente en otros lugares del mundo o cerca que, probablemente lo tenga mas complicado de sobrellevar, de vivir una pandemia, no se que aprender, cuando acabe todo lo sabré, o eso creo.

Bueno de todo esto me alegra el corazón que la tierra se recupera de la basura que le estuvimos dando por tantos años. la parada industrial por este periodo tan corto sirve para que cielo, aguas, tierra, se aclaren y limpien. «

 

*Las imágenes que acompañan este artículo pertenecen a la artista Irene León, te recomendamos visitar su sitio web  Irene León o síguela en las redes a través de Instagram Irene León Artist